Llegué a Milán en Agosto del año pasado y en
Septiembre empecé a conocer nuevos sitios. El primero fue el Lago de Como.
Este lago se encuentra en la provincia de Lombardía,
al igual que Milán, concretamente a 49 kilómetros de distancia. Es uno de los
más profundos de Europa con 416 metros de profundidad, y uno de los más grandes
de Italia, después de Garda y Maggiore.
A lo largo de la historia sus pueblos han sido
escogidos por personajes célebres como lugar de residencia o de vacaciones,
entre ellos: Leonardo da Vinci, Napoleón Bonaparte, Giuseppe Verdi o Winston
Churchill. Y en la II Guerra Mundial, cerca del lago, en el pueblo de Dongo en 1945,
la Resistencia Italiana capturó a Benito Mussolini. Pero no hace falta
retroceder tanto en el tiempo, hoy son los elegidos entre famosos actuales,
como George Clooney, dueño de villas situadas en Laglio o incluso Madonna.
Otro dato a destacar, es que ha servido de escenario
para varias películas como El ataque de los Clones, Ocean’sTwelve o Casino
Royale.
Dejando atrás todo esto, os contaré mi viaje. Salimos
en tren desde Milán sobre las 10 de la mañana y a las 10:45 habíamos llegado. Nos
encaminamos hacia el funicular para subir hasta Brunate y poder ver Como desde las alturas. Después de una larga
caminata hasta el faro Voltiano,
reposamos allí y sacamos alguna que otra foto.
Este faro de 30 metros de altura fué construído en
1927 por Alejandro Volta y consta de 143 escalones en forma de caracol. Una vez
disfrutado de las maravillosas vistas desde el faro, bajamos de nuevo a Brunate
para comer una comida típica del norte de Italia: polenta y mascarpone como
postre.
Con el estómago lleno, cogimos el funicular y bajamos
a Como para ver la ciudad. Lo primero fué el Duomo, también llamada Catedral de Santa María de la Asunción.
Siguiendo con nuestra visita nos aproximamos a el Templo Voltiano, un museo de estilo neoclásico construido en 1927
para conmemorar el primer centenario de la muerte de Alejandro Volta (inventor
de la batería que nació y vivó en Como).
El Monumento a los Caídos, torre de 30 metros de altura totalmente forrada de piedra, guarda en su interior un monolito de granito de 40 toneladas con los nombres grabados de las 650 personas de Como que perdieron su vida en la Primera Guerra Mundial.
El Monumento a los Caídos, torre de 30 metros de altura totalmente forrada de piedra, guarda en su interior un monolito de granito de 40 toneladas con los nombres grabados de las 650 personas de Como que perdieron su vida en la Primera Guerra Mundial.
Finalmente nos dedicamos a pasear por la ciudad y a
esperar a que llegase la hora de volver a Milán. Pero no quiero terminar sin
comentaros que también existe la opción de dar un paseo en bote por el lago y
apreciarlo desde dentro!
Un viaje corto y muy recomendable en el que poder
disfrutar de la naturaleza y de los grandes paisajes.
0 comentarios