En la región de Normandía,
al noroeste de Francia, se encuentra una de las maravillas del país: el Monte Saint Michel. Se trata de una
isla rocosa, ubicada en el estuario del río
Couesnon, en la que según se cuenta, apareció la figura del arcángel san
Miguel en variadas ocasiones. Este fue el motivo por el cual Aubert, obispo de
Avramches, decidió construir un santuario que con el paso de los años se fue
convirtiendo en abadía hasta llegar a ser el lugar mágico que hoy en día
conocemos. Una de las razones que le hacen ser un lugar tan especial son los
cambios en el nivel del mar.
El monte Saint Michel, declarado Patrimonio de la
Humanidad por la Unesco, es el escenario de mareas más grandes de Europa. En
consecuencia, esta pequeña porción de tierra, de aproximadamente cuatro
kilómetros cuadrados, se convierte en isla durante la pleamar y en una
minúscula península en las horas de bajamar. Para visitarla es obligatorio
dejar el coche o autobús en el parking localizado a la entrada y coger el autobús gratuito, que para a los pies
del promontorio, o bien un coche de caballos cuyo precio podéis consultar AQUÍ.
Autobús gratuito
Coche de caballos (consultar precio)
Plataforma que conecta con la Saint Michel
Mount Saint Michel
En bajamar
Abadía desde abajo
Al flanquear las puertas de acceso a Saint Michel,
las calles y casas empedradas os harán sentir que habéis retrocedido en el
tiempo, concretamente a los siglo XII y XIII, cuando fueron construidos la gran
mayoría de los edificios y la muralla que los bordea. Entre ellos están el del Museo Histórico, con pinturas,
esculturas y representaciones procedentes de la Edad Media; el del Mar y la Ecología, donde se explica el
funcionamiento de las mareas y como estas han afectado a lo largo de los años;
o el Archéoscope, un espacio que
muestra el proceso de construcción de la joya de la corona: la Abadía de Saint Michel.
Esta abadía benedictina fue fundada en el 966 y es
muy recomendable entrar a visitarla. En su interior se puede ver la iglesia
abacial, la zona donde vivían los monjes: ‘la Marvelle’, el claustro principal
y otra serie de edificaciones de gran belleza. El precio de visita es de nueve
euros, siete para menores de 25 años. Os recomiendo consultar los horarios ya
que en Francia los sitios turísticos suelen cerrar muy pronto.
Entrada al Monte Saint Michel
Museo Histórico
Abadía del Monte Saint Michel
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