Como ya sabréis Milán es de mucho frío y nevadas en invierno, y mucho calor en verano, un calor sofocante que te impide casi moverte. Y con el llegan los mosquitos, así que no os olvidéis de llevar el spray, ya que son mosquitos tigre, mucho más grandes de lo que os podáis encontrar en España.

Y os preguntaréis qué hacer para combatir este calor, si no hay mar. Pues bien, en verano se abren las piscinas públicas y es una de las pocas alternativas que hay para refrescarse. Os dejo la página en la que podréis encontrar el elenco: Piscinas al aire libre. Antes de que os metáis, os adelanto que suelen tener un precio de 5 euros el día.

Si no queréis pagar nada también podéis ir a Punta del'Est, que es un falso lago que se construyó para los aterrizajes de hidroaviones y que ahora está abierto para los bañistas. A mí no me gusta ya que es un poco sucio. Y otra buena opción es ir al Aquapark que se encuentra a las afueras de la ciudad y se llama Gardaland Waterpark, no es muy grande pero está bien. El precio es de 18 euros el día entero y 20 los fines de semana.

Y con la llegada del verano, cambian las discotecas. Las que frecuentaréis en invierno se cerrarán y darán paso a grandes discotecas con terraza. Esto lo podréis encontrar en el post de Discotecas de Milán, en unos días.